Empezaremos por la cruz para acabar con buen sabor de boca. Sin lugar a dudas, este fin de semana la cara mala la ha dado la caza mayor. No fue buena montería la del domingo en "El encinar". Tras el rotundo éxito del año pasado, se esperaba más para esta mancha. No sabemos si la mancha no estaba como se deseaba, si el trabajo de las máquinas tanto en partes de esta zona como en manchas colindantes o, como temían algunos, que la mancha hubiese sido levantada, supuso un condicionante claro para el resultado final, pero lo cierto es que apenas hubo caza, sobre todo, los jabatos se hicieron esperar.
También hubo quien lo achacó a la escasa asistencia de cazadores (motivado en parte por el éxito que está teniendo este inicio de temporada la caza menor) ya que con apenas 70 puertas apenas si dió para cubrir en condiciones los escapes de las reses. De hecho, hubo armadas que vieron tropas de cochinos moverse dentro de la zona pero que, nunca salieron del monte, quizás achacado a la larga distancia a la que estaban colocadas las puertas. Otro caso fue que no se pudieron cubrir en su totalidad los escapes naturales de los animales.
Sea como fuere, las rehalas soltaron puntualmente a las 10 y lo primero que extrañó es que hasta casi entrada las 11 no se escucharon los primeros tiros. También se esperaba mucho de la armada que se colocó en el barranco de el duende, en su escape a la Palmita, pero ni un solo tiro. Del mismo modo, a la vuelta hacia la carretera, donde se esperaban los cochinos, no se levantó ni un solo ejemplar ¿demasiado cerca de la corta de eucaliptos? En el margen derecho de la carretera se cobraron 3 de las 13 reses cobradas.
En el margen izquierdo fue otra cosa y gracias que se cazó una zona nueva, la trasera del pantano san Walabonso, que al menos dio otro juego a la montería. De destacar el doblete a jabato de Juan Manuel Chicha, una muy buena boca (la mejor en lo que va de temporada) y una buena cochina que le sorprendieron a la hora de quitarse de su puerta, ya recogiéndose la armada.
Como dicen algunos "estamos mal acostumbrados y no en todas las monterías se pueden matar ya 30 ó 40 reses"
La cara la dio la caza menor.
En primer lugar, destacar de nuevo las gestiones hechas por la Directiva repoblando el coto. Nuevamente una suelta de pájaros, otros 150 ejemplares soltados en Romeral y Malabrigo, en las zonas habilitadas con comederos, pájaros provenientes de la Estación de Referencia de la Perdíz Roja de Lugar Nuevo, Andújar (Jaén) propiedad de la Consejería de Medio Ambiente. Pajaros que han demostrado y están demostrando su gran capacidad de adaptación a nuestra zona y que, junto con la anterior suelta, están haciendo del disfrute de nuestros asociados. Aunque su caza, en nada está resultando fácil y, o cuentas con perros capaces de levantarlos, o haces un "blanco" en la percha. Además,demuestran una gran dificultad al tiro en contra de lo que, en principio, pueda parecer y, de hecho, muchos cazadores acuden confiados y al final los tiros no salen por donde quieren.
También de resaltar, la dificultad del conejo, que, o se cuenta con una buena terna de perros o te vienes de vacío a casa. Además, quizás haga falta adaptar un poco la zona de caza realizando tiraderos y limpiando un poco de maleza la mancha, pues dificulta en exceso tanto la caza que apenas se consigue un tiro fácil a pesar del trabajo de los perros.
En segundo lugar, destacar que muchos, a las 10.30 de la mañana ya estaban en casa con el cupo hecho o, sin cupo, pero con una gran rato de caza, los hubo triunfadores: Diego "Rana", Garrocheno y Angelillo o la terna de David, Manuel y Miguel, entre otros. Jesús Vidosa y su Tío Paco, a lo suyo, dando envidia en los conejos y liebres. Para todos ellos, buen fin de semana.
Galería de fotos:
La pizarra de la mancha, 9 armadas para 62 puertas
Momento de dar las instrucciones para la montería.
El mejor jabato de la temporada (hasta la fecha) de Jose Manuel"Chicha" en su primera montería del año., haciendo doblete. En la foto de arriba junto al postor Manuel González, abajo junto a su acompañante de montería.
En la recogida de la montería, los rehaleros acopiando sus perros esperando el coche. Gracias a las lluvias del día antes, los perros tuvieron agua donde saciar la sed, pero aún con ello, el calor hizo mella en ellos.
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La carta de origen de los pájaros soltados.
Momento de cargar en el coche por los directivos los ejemplares recibidos por la Junta.
En su suelta, ya demostraron una gran vuelo estos ejemplares y daban a entender que su caza no iba a ser fácil.
Habilitando la zona de suelta, con comida y bebederos artificiales, para facilitarles su adaptación
