El pasado día 18 tocaba una de las monterías con más solera de los últimos años en Niebla. La mancha era la del "Castillo" que, junto a "Siete Chozas" (su hermana vecina), suponen dos días fijos para muchos monteros de Niebla. Las esperanzas de inicio, para los más pesimistas, no era buena pues las labores de corta y limpieza de los últimos meses, les ayudaba a mantener el argumento de que la mancha estaría limpia de reses. Para los más optimistas era totalmente lo contrario, ya que es una de las que más reses aportan siempre al cupo final del año.
Antes del inicio del día de caza, como es costumbre desde que el Club se hizo cargo, el brindis navideño ofrecido por la Directiva con las "copitas" típicas de vino dulce o anís y los polvorones para festejar las navidades.
Aunque la suelta de las rehalas no era hasta las 10.30 como de costumbre, los primeros tiros se escucharon en la puesta de los monteros, concretamente los primeros tiros se produjeron sobre las 10 menos 20. Las reses se empezaron a mover rápidamente intentando huir de la mancha al percatarse del movimiento de coches, rehaleros, etc. Esta montería se caracteriza también por ser una de las más largas en el tiempo y en el espacio. Para hacer las cosas bien, los perreros deben entretenerse para sacar los jabatos de sus encames y, por si fuera poco, es un zona que la orografía no ayuda mucho a su batida ya que los desniveles de terrenos son grandes y abruptos. Pero todo importa poco a la hora de disfrutar de una jornada cinegética y más para los que le gusta disfrutar de su terreno, de "su coto".
Los datos estadísticos de participación son igual que siempre, unas 70 puertas con 5 rehalas batiendo la mancha, es decir, la media del año. El resultado (como siempre, lo de menos) 9 venados, 4 cochinos y 12 ciervas. Los análisis los hubo de todos los gustos.
Lo primero que esta vez se estrenaron muchos monteros de los que aún no lo habían hecho a lo largo del año. Destacar también que hubo pocos casos de cazadores que repitiera en sus puertas, tan sólo 4 de ellos, por lo demás hubo mucha dispersión en las puertas agraciadas con la suerte de ser visitada por una res a abatir. De destacar al rehalero Diego Ramos, que se quedó sin balas en la suelta, haciendo de cierre de la mancha para evitar la salida de ejemplares de la mancha. O el amigo Antonio "El Puñi" con dos venados cobrados en su puerta, al igual que Macias "EL colombo" que también abatió dos pero éste hizo doblete ya que venían los dos en la misma collera (él fue el que abrió la montería ya que suyos fueron los primeros tiros oídos en la colocación de las puertas por los postores).
Nuevamente lamentar la escasa predisposición que existe entre los monteros en cazar las hembras de ciervo, a pesar de las 12 cazadas, pues fueron avistadas en piaras de hasta cerca de 20 ejemplares. Habría que hacer un llamamiento para la mentalización de los monteros para abatir dichos ejemplares ya que los motivos son varios:
1º.- El Plan Técnico, prevé que se cacen al año 100 ejemplares para evitar la superpoblación. Con ello se evita la competencia en la alimentación, se mejora la especie y la calidad del trofeo a la larga.
2º.- Existen manchas, como es éste el caso, que se ven afectadas por casos de denuncias por daños a cultivos por fincas colindantes y, en otros casos, por cercanías a carreteras que originan accidentes de tráfico. De hecho, esta misma semana ha llegado una demanda al Club procedente de La Palma del Condado ( a pesar de que es un coto que no colinda con el nuestro) por reclamación de daños, que en caso de ser estimada por un juez conllevará pagar unos gastos que al final sufragamos todos los asociados.
3º.- A nivel cinegético, la superpoblación de cérvidos está acarreando que la competencia por el alimento sea mayor y los animales se vean obligados a colonizar zonas nuevas que quedan fuera del alcance de la caza. De la misma manera, en manchas como ésta, con un alto nivel competencial de alimentos genera un empeoramiento en la calidad del trofeo, como se puede apreciar en los venados abatidos a diferencia de otras donde los ejemplares si gozan de un mejor porte.
4º.- Por último, a nivel de caza, dado que los ciervos se mueven con más desconfianza que los jabalís y más pronto que ellos pues, apenas escuchan los primeros movimientos, ya se están levantando conlleva que los perros también se ceban con ellos, dispersándolos más fácil de lo normal y consiguiendo que se entretengan menos en levantar los jabalís cuyo encame es más laborioso de espantar al cazadero que el de los ciervos. Muchas veces se puede observar cómo al final de la jornada se pueden observar a perreros que apenas les quedan perros con los que entrar a zonas calientes para el jabato, o con perros ya bastantes mermados y cansados por las carreras incesantes tras las ciervas.
Sea lo que sea y que será objeto de debate en otro foro, los jabalís se dejaron ver poco esta domingo a pesar de que es una mancha propensa a amparar muchos de ellos (como decíamos al principio, tiene un orografía que propicia muchos rincones para ello). Para el próximo año estarán.
Ahora toca el parón de navidad y hasta el próximo día 8 de enero no se reiniciarán las monterías. Para los más ansiosos les pedimos paciencia porque aún quedan 4 jornadas de las mejores: La Atalaya, Montemolín, La Reserva y Maranduja.
Para todos:
FELICES FIESTAS Y NOS VEMOS EL DÍA 8 DE ENERO.
Después de la jornada, bastante larga, nada como un buen temtempié para reponer fuerzas, cualquier sitio vale para ubicarse y, si es una nevera como mesa, pues bienvenida sea.
Momento en e que llegan a la Junta de Carne los 4 jabalís del día que aunque ninguno fuera un trofeo especial, si es cierto que todos ellos merecían la pena.
Los perros del "chamusquina" acabaron exhaustos adoptando las formas más inverosímiles pero a su vez divertidas a la vista para dormitar después de la cansada jornada.
Todo quieren posar con sus trofeos. en la foto Ávila con su marranchón del día.
Antonio "El Puñi" con sus dos venados. El de su izquierda con un cuerpo descomunal aunque el trofeo no le acompañó a tan semejante "mole".
"Puñito" padre también quiso posar con los dos ejemplares abatidos por su hijo. En la foto muestra con orgullo el fruto de lo inculcado a su hijo.
Valeriano con su joven montero y nieto que "no se pierde una" haga frio, calor, fiesta, lluvia, sueño o lo que sea. el domingo es el despertador de su padre y de su abuelo ansioso por salir al campo.
Buen estreno el de este año por "El colombo". Tuvo buen regalo de cumpleaños a pesar de que no se decidió ir a la montería hasta última hora.
Como siempre decimos: LO MEJOR DEL DÍA. Compartir con los compañeros la jornada, cada uno contando su historia pero todos a una. Y como dice y se enorgullece Juan el de "La espejita" (que este domingo ha descansao") aquí nadie se conoce por llevar un "DON" delante del nombre.